El doctor Ignacio Muñoz es considerado en actualidad uno de los traumatólogos y cirujanos ortopédicos más reconocidos del tenis mundial. No en vano, este ilustre profesional buñolense ha tratado a deportistas como Rafa Nadal, Sharapova, David Ferrer y Juan Carlos Ferrero, entre otros muchos. Actualmente ejerce como Jefe del Servicio de Traumatología en el Hospital Casa de Salud Valencia.
El hecho de que los deportistas de élite dejen en sus manos los procesos de recuperación y las operaciones más complicadas corrobora que estamos ante uno de los especialistas más contrastados en este campo. Su bagaje profesional así lo corrobora.
DXTlider ha tenido el enorme privilegio de charlar con él justo días después de su participación en la eliminatoria de Copa Davis junto al combinado español en Valencia. Su carácter afable y cercano nos ha permitido conocer más en profundidad su trabajo, así como los nuevos campos de investigación. En este punto, nos comenta que su vinculación al mundo del tenis se estrechó con la eclosión de deportistas como Juan Carlos Ferrero, David Ferrer o el ruso Marat Mubínovich Safin, afincado en la capital del Turia. Sin embargo, también ha trabajado en la Selección sub-21 de fútbol de Qatar, en la Copa América de Vela, en el Pamesa Valencia Basket y como médico consultor en el Ros Casares.
«Actualmente, la medicina deportiva requiere muchísima especialización. Por este motivo, abordamos las lesiones de forma global. Nos preocupamos por conocer qué las provoca o cómo se han producido para poder desarrollar trabajos preventivos. A día de hoy, los tratamientos han evolucionado notablemente. Aquí, la medicina regenerativa adquiere un enorme protagonismo. Lo que buscamos con ella es que el propio cuerpo acelere la recuperación. En este campo, el trabajo con células madre es muy importante», explica.
Preguntado por los efectos de los tratamientos actuales sobre la calidad de vida de los profesionales cuando abandonen la competición de alto nivel, el doctor Ignacio Muñoz aclara que los regenerativos «son más respetuosos con el envejecimiento normal de los tejidos». En este punto, puntualiza que lo que realmente puede condicionar el futuro de los tenistas es la sobrecarga de partidos. «No en vano, muchos de ellos pueden padecer artritis residuales y problemas de cadera, entre otros», asegura.
«Nuestro trabajo con el deportista de élite se centra en ayudarle a conocer su propio cuerpo y a saber gestionar lo que éste le dice en cada momento. Intentamos también mejorar los tiempos de respuesta de los tratamientos, sin que haya perjuicio para el jugador. Lo que probamos con los profesionales se transmite posteriormente a la población en general», concluye. Informa Vicente Montó.