La actividad deportiva en el pabellón cubierto de Siete Aguas ha sido suspendida este pasado fin de semana como consecuencia de las persistentes lluvias y de las intensas nevadas.
Las filtraciones de agua en el edificio impiden el normal desarrollo del juego, a lo que se une la dificultad para acceder a la zona debido a la acumulación de nieve.
El caso de Siete Aguas no es algo aislado, pues en Buñol persisten las goteras que han obligado a suspender también los partidos de balonmano en varias ocasiones.